Bolsas estanca y de compresión

Las bolsas estanca están diseñadas para proteger tu equipo de la humedad, la lluvia e incluso una inmersión breve en el agua. Son indispensables en actividades como trekking, kayak o rutas en climas húmedos, donde mantener el contenido seco es crucial.

Características principales:
•    Impermeabilidad total: Fabricadas con materiales como nailon revestido de poliuretano o TPU, que ofrecen una protección impermeable fiable.
•    Sistema de cierre enrollable: El cierre roll-top crea una barrera hermética cuando se enrolla y se asegura con una hebilla.
•    Ligereza y resistencia: Modelos como la Sea to Summit Lightweight Dry Sack combinan ligereza y durabilidad, ideales para el trekking.

Tipos de bolsas estanca:
1. Ultraligeras: Diseñadas para los minimalistas, como las Sea to Summit Ultra-Sil Dry Sacks, hechas con nailon siliconado.
2. Resistentes: Pensadas para actividades más exigentes, como la Big River Dry Bag, fabricada con material robusto y resistente a la abrasión.
3. Con válvula de purga: Permiten expulsar el aire atrapado dentro, optimizando el espacio en la mochila.
 

Las bolsas de compresión están diseñadas para reducir el volumen del contenido, permitiéndote aprovechar mejor el espacio en tu mochila. Son perfectas para comprimir ropa, sacos de dormir o capas voluminosas.

Características principales:
•    Sistema de correas: Utilizan correas laterales que comprimen el contenido, reduciendo significativamente su volumen.
•    Material ligero y resistente: Como las Sea to Summit eVent Compression Dry Sack, que combinan impermeabilidad y compresión gracias a su base de eVent, un material que permite liberar aire sin dejar pasar agua.

Tipos de bolsas de compresión:
1. Tradicionales: Hechas de nailon resistente, ideales para ropa y equipo voluminoso.
2. Impermeables: Como las mencionadas eVent Compression Dry Sack, que protegen el contenido de la humedad mientras lo comprimen.
3. Ultraligeras: Modelos específicos para quienes priorizan la ligereza, como las Ultra-Sil Compression Sacks.
 

1.    Uso previsto:
Si planeas actividades en entornos húmedos o con riesgo de lluvia, opta por una bolsa estanca. Para ahorrar espacio en la mochila, una bolsa de compresión será tu mejor aliada.

2.    Capacidad:
Las bolsas estanca y de compresión vienen en distintos tamaños, desde 1 litro hasta más de 30 litros. Evalúa cuánto equipo necesitas proteger o comprimir.

3.    Material y peso:
Busca un equilibrio entre durabilidad y ligereza. Si prefieres minimizar el peso, elige modelos de nailon ultraligero. Para actividades más exigentes, prioriza materiales robustos.

4.    Cierre y sistema de compresión:
Asegúrate de que el cierre enrollable sea fácil de usar y ofrezca un sellado hermético. En las bolsas de compresión, verifica que las correas sean resistentes y fáciles de ajustar.

5.    Válvula de aire:
Algunos modelos de bolsas de compresión impermeables incluyen una válvula para expulsar el aire y optimizar el espacio, una característica especialmente útil en travesías largas.
 

Tanto las bolsas estanca como las de compresión son complementos esenciales para cualquier amante de la montaña. Mientras las bolsas estanca protegen tus pertenencias de la humedad, las bolsas de compresión optimizan el espacio en tu mochila. Marcas como Sea to Summit ofrecen una amplia variedad de opciones adaptadas a diferentes necesidades y aventuras. Elegir la adecuada puede marcar la diferencia entre una experiencia cómoda y organizada o una salida llena de inconvenientes.